Un gran grado de intimidad en la pareja en el que nos queremos mejor, sin renunciar a nosotros mismos

Toda esta etapa de descubrimiento interior de mi vida comenzó cuando Nagore empezó a acompañar a mi pareja, hace ya unos 5 años. Esto provocó que ella empezara a cambiar internamente, lo cual se reflejó en la convivencia. Recuerdo que me sentía perdido, sin rumbo, como si me hubieran cambiado el mapa. Esto mismo, unido a mi inquietud, en ocasiones reprimida por mi mismo, de conocerme mejor provocó que yo diera el paso a este nuevo capítulo de mi vida. Fue gracias a Nagore que encontré a otro terapeuta a mi medida. 

Y bueno, a partir de ahí zarpó el barco que ha ido navegando, y seguirá haciéndolo por todo mi interior. A veces a través de tempestades, y en otras ocasiones a través de remansos de calma que quizás no lo son tanto. Tras un período de unos 3 años en terapia individual y grupal, Nagore nos propuso realizar algunas sesiones de terapia de pareja y la verdad es que siento que me ha ayudado a conocerme mejor que en la terapia individual. 

Hemos trabajado con las voces, con muchos de los Albertos que hay en mi interior, y que están ahí, a cada instante de mi vida, aunque a menudo no me percato de ello. He podido comprender mejor su función y darles más voz y volumen a partes de mí que estaban silenciadas, escondidas, avergonzadas… Y aunque el trabajo sigue, por fin tienen el valor que merecen desde mi propia mirada. 

Y todo esto delante de mi pareja, que también hizo lo mismo. No digo que sea fácil, de hecho, sentí un torbellino de emociones a las que me costó enfrentarme pero gracias a la ayuda de Nagore, conseguimos llegar a una mayor comprensión y aceptación mutua, tanto individual como en pareja. Con este trabajo hemos logrado un grado de intimidad en el que nos queremos mejor, sin renunciar a nosotros mismos. Me recorre la emoción por el cuerpo al sentirlo, qué bonito y qué agradecido me siento de haber compartido la experiencia con mi pareja. 

Gracias Nagore por tener este espacio y yo lo recomiendo a todo el mundo. Creo que es sanador.